El 2 de marzo pasado, nos sumergimos en un emotivo taller de Habilidades Comunicativas en la Escuela de Comunicación Via3Tv, guiados por la profesora Marcela Castellanos. Durante esta experiencia, aprendimos y reconfiguramos nuestra comprensión sobre la importancia de establecer estrategias comunicativas que promuevan la comprensión mutua sin perder de vista la singularidad de cada individuo. En última instancia, la comunicación actúa como un vehículo que construye y facilita la coexistencia en armonía.
La profesora Marcela Castellanos nos desafió con una pregunta fundamental: «¿Cómo es posible que la comunicación sea posible o cómo es posible que la comunicación no sea posible?» Esta pregunta fue el punto de partida para una reflexión profunda junto a los participantes del taller, explorando los motivos que nos impulsan a comunicarnos.
La comunicación va más allá de transmitir un mensaje gramaticalmente correcto; involucra una interacción compleja de factores conscientes e inconscientes que influyen en cómo comprendemos y reaccionamos ante lo que se comunica. Dominar y canalizar estas variables de manera positiva nos permite establecer relaciones basadas en el entendimiento.
La comunicación, en su esencia, es un acto de generosidad, una búsqueda de conexión y compartición. También es un medio de seducción que pretende generar interés y conexión con lo que se transmite. A su vez, la comunicación se convierte en una herramienta persuasiva que facilita la argumentación y la búsqueda de acuerdos. Por último, no menos importante, la comunicación se utiliza para negociar y coexistir con los demás. La profesora Marcela Castellanos destacó estos cinco aspectos clave.
La escucha activa, un primer paso hacia una comunicación efectiva, se revela como un reto titánico en la resolución de conflictos, a pesar de ser una habilidad fundamental. Escuchar de manera genuina nos acerca a la certeza, fomenta la conexión y facilita la búsqueda de soluciones comunitarias.
La empatía, otro desafío crucial en las Habilidades Comunicativas, implica ponerse en el lugar de los demás, reconocer su perspectiva y partir desde el autoconocimiento. Al adoptar esta postura, somos capaces de comprender diferentes puntos de vista y mejorar nuestra interpretación, lo que reduce tensiones y guía hacia la resolución de conflictos.
La profesora Marcela Castellanos también exploró el lenguaje no verbal, revelando su papel como posible debilidad o fortaleza en la comunicación. Gran parte de nuestras conversaciones se transmiten a través de señales no verbales como el tono, el volumen, los gestos y las posturas corporales. Estos detalles a menudo superan la comunicación verbal y nos brindan una lectura más completa del mensaje.
Durante el taller, las comunidades compartieron sus escritos sobre sus territorios, reafirmando la importancia de cultivar un estilo comunicativo distintivo. Este ejercicio resaltó el pensamiento comunicativo único de cada comunidad y cómo este estilo propio contribuye a la creación de nuevas narrativas en sus territorios.
Si deseas ver el taller completo, puedes acceder al siguiente enlace: